Robis Krill es un suplemento natural a base de aceite de krill antártico que ayuda al buen funcionamiento del corazón, el sistema circulatorio y a reducir el colesterol. También mejora las articulaciones por su efecto antiinflamatorio.
El Krill es un pequeño crustáceo similar a un camarón que vive en las aguas de la Antártida. Es un alimento esencial en la cadena alimenticia de muchas especies de la zona.
Es una fuente natural de EPA y DHA, dos ácidos grasos esenciales para nuestro corazón.
El Krill tiene un alto contenido en aminoácidos esenciales, minerales, oligoelementos y vitaminas, lo que lo convierte en un gran reconstituyente metabólico.
Por lo tanto, protege dientes, cabello y huesos, evitando su descalcificación y la pérdida de masa ósea
Podemos encontrar en el aceite de krill estos minerales: Calcio, Magnesio, Fósforo, Selenio, Zinc, Sodio, Yodo, Flúor, Manganeso, Cobre y Potasio.
El aceite de Krill antártico es una fuente importante de fosfolípidos, omega 3 y astaxantina. Es por este motivo que nos beneficia en estos casos:
- Reduce el riesgo de sufrir problemas cardiovasculares.
- Mejora el perfil lipídico, reduciendo el colesterol y los triglicéridos.
- Tiene un efecto muy beneficioso sobre las estructuras visuales y cerebrales, ayudando a su mantenimiento en óptimas condiciones.
- Tiene efecto antiinflamatorio , mejorando y previniendo alteraciones en las articulaciones.
- En mujeres también es beneficioso, ya que mejora los síntomas del síndrome premenstrual y la dismenorrea.
- Los ácidos eicosapenatanoico (EPA) y docosahexanoico (DHA) contribuyen al funcionamiento normal del corazón. El efecto beneficioso se obtiene con una ingesta de 250 mg de EPA y DHA.
INGREDIENTES:
Aceite de krill antártico (40% FOSFOLÍPIDOS, 10% EPA, 5,5% DHA 0,02% (100 mcg)
ALTO CONTENIDO EN ASTAXANTINA 100 mcg/cápsula.
MODO DE USO:
Tomar 1 cápsula diaria ingerida con un vaso de agua, junto a la comida. Si quiere optimizar los resultados, puede aumentar hasta 3 cápsulas al día.
PRESENTACIÓN:
Envase con 30 cápsulas de 692 mg